El romero no solo es una hierba aromática de cocina, sino también un potente remedio natural con beneficios sorprendentes para tus pies y tu salud general. 




Gracias a compuestos como el ácido carnósico y el ácido rosmarínico, el romero combate eficazmente hongos como el pie de atleta y la onicomicosis (hongos en las uñas), además de infecciones bacterianas en la piel.


Un baño caliente con romero favorece el flujo sanguíneo en las extremidades, aliviando pies fríos, hinchazón y fatiga.


Por sus propiedades antiinflamatorias, el romero es ideal para calmar dolores en los pies, calambres y rigidez en las articulaciones. Ideal tras un día largo.

El aroma del romero reduce el cortisol (hormona del estrés) y promueve una sensación de calma. Perfecto para usarlo como ritual de relajación nocturna.


Sus compuestos antimicrobianos y su aroma refrescante eliminan bacterias causantes del mal olor en los pies, dejándolos limpios y revitalizados.

• 2 cucharadas de romero seco (o algunas ramas frescas)
• 1 litro de agua caliente
• Deja reposar 10–15 minutos, luego remoja los pies durante 20 minutos
• Opcional: añade sal marina o unas gotas de aceite esencial de árbol de té
Tambien el romero sirve para saumear la casa, para una limpieza espiritual y tranquilidad en tu hogar. En este caso debe de estar seco, y/o ponerlo en un florero sin agua y cuando se seca, se usa para saumear. Siempre es muy bueno tener Romero en tu casa.
